Sólo hay un camino para recuperar el dinero invertido en Bankia para el pequeño inversor
Las acciones de Bankia, crónica de una quiebra anunciada
Para saber qué ha pasado en Bankia y por qué ahora sus accionistas están con el culo al aire, con perdón de la expresión hemos de remontarnos a entre un año y siete meses atrás y ver cómo en una maniobra del sálvese quien pueda se permitió que siete cajas más enladrilladas que el cielo del trabalenguas se fusionaran en lo que ahora conocemos como Bankia, separando sus activos deficitarios, los llamados activos tóxicos en otro banco aparte llamado el BFA.
Pues bien, gracias a esa maniobra la entidad seguía siendo demasiado vulnerable, y lo sabían, lo sabían tanto sus miembros como todos los posibles inversores extranjeros, y lo sabían tan bien que se sólo les quedaba la opción de conseguir capital de los con perdón, más fáciles de engañar, el pueblo llano.
La estafa orquestada de la venta de acciones de Bankia
Los bancos y empresas de inversión, los brokers experimentados, y cualquiera con dos dedos de frente sabía que Bankia no iba a levantar cabeza en bolsa, y no arriesgaría su dinero, así que Bankia simplemente lo buscó entre sus clientes. La entidad cuenta con una ámplia red de vendedores y la privilegiada información de quien tiene dinero en sus cuentas y quien no, así que planificaron su salida a bolsa con la venta de sus acciones al pequeño inversor.
A sus clientes les ofrecieron las acciones de Bankia como una inversión segura y rentable, de la que iban a cobrar cada año estupendoe dividendos. Y muchos clientes picaron, vaya si picaron. Pues bien, un cliente que, por ejemplo, invirtió 10.000 Euros en Bankia puede ver como ahora el valor de su dinero invertido se ha reducido a la nada desdeñable cifra de 6.217 Euros, es decir, en el momento de escribir estas líneas lleva perdidos 3.783 euros aproximadamente en menos de 12 meses.
Pero las acciones de Bankia podían bajar, como todo en bolsa¿Era una estafa?
Aquí viene el quid de la cuestión. Si los vendedores de Bankia, con una enorme labia más de trileros de la calle que de aficinistas honrados te han repetido una y mil veces la seguridad de las acciones de Bankia y sus garantías, aún a sabiendas de que no era seguro en absoluto, SÍ, sería una estafa, punible y sancionable con todas las de la ley.
El pequeño accionista como rehén para obtener un futuro rescate
Otra de las teorías descabelladas en las que podriamos encontrar una presunta estafa es el hecho de que con el conocimiento del más que posible desplome de la entidad, Bankia haya intentado captar el máximo capital posible de pequeños accionistas para así forzar un rescate en el momento de su quiebra, con lo que estaríamos ante un asalto a la banca nacional en toda regla perfectamente orquestado. Esta posibilidad no parece tan factible desde el punto de vista de que alguien capaz de algo tan complicado debería poder sacar a flote un negocio en lugar de acabar de hundirlo, pero en fin, cada uno que saque sus conclusiones en ese aspecto.
Entonces ¿Cómo recuperar el dinero invertido en Bankia?
Si te han estafado, denuncia, si han estafado a muchos como tu por el mismo método, crea una plataforma de afectados y denuncia. Las acciones de Bankia no van a subir, por mucho que se empeñen en decirnos que sí. Sólo han subido con autocarteras y con un empujón de Morgan Stanley en su salida a bolsa y del que ésta ya se benefició ampliamente. Esto significa que no recuperarás tu dinero pequeño inversor de Bankia, no lo recuperarás a no ser que demuestres que te han estafado y ante un juez claro está.
Mirar con lupa las caídas de Bankia en bolsa para detectar otra posible estafa
A esto hay que sumar la posibilidad de que la directiva de Bankia haya estado beneficiandose ámpliamente de los vaivenes de Bankia en bolsa, no hay que olvidar en ningún momento la enorme cantidad de autocartera que tenía esta entidad, y por la cual es posible que sus propios directivos además de haber reinvertido, hayan sido los responsables de muchas de las caidas al recuperar beneficios soltando las acciones para después volver a invertir.
Para ello habría que comprobar los grandes movimientos de compra-venta y ver de dónde vienen y a quien benefician en muchos de los casos.
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